Es de todos conocido que la planificación de un menú semanal es la clave para conseguir llevar una alimentación sana, saludable y sabrosa sin que se convierta en una pesadilla. Y es que hay una escena muy repetida a diario en todas las casas con el temido, “¿qué comemos hoy?”.
Las ventajas de hacer un menú semanal son muchas: ahorro de tiempo, de dinero y facilidad de incluir alimentos variados y nutritivos. Ten en cuenta que cocinar o comprar con hambre supone gastar más dinero y terminar comiendo peor.
10 consejos para planificar tu menú semanal
- Incluye verduras todos los días.
- Utiliza el comodín de las comidas de emergencia. Son esas comidas aptas para congelar y que te sacan de aprietos en esos días que no tienes tiempo para cocinar: calientas y listo.
- Elige el día para cocinar. Te sugerimos esta organización: el viernes realizas el menú y haces la lista de la compra; el sábado lo dedicas a comprar; y los domingos a cocinar.
- Usa ingredientes de temporada.
- Introduce alimentos y recetas nuevas un día a la semana. De esta forma tus menús tendrán una base innovadora y también tus conocimientos y dotes culinarios. Poco a poco conocerás nuevas recetas y tu motivación irá aumentando.
- Se flexible y ten en cuenta imprevistos y el tiempo del que dispones. Por ejemplo, si tienes previsto una semana complicada y con mucho estrés, no te cargues con recetas difíciles y vete a lo sencillo.
- ¿Cosas a tener en cuenta para realizar tu menú semanal? el tiempo, ya que no es lo mismo si va hacer calor o frío para que nos apetezcan unas platos u otros; deja algún día del fin de semana libre por si soléis comer fuera; ten en cuenta el menú del comedor del colegio; ¿te llevas tupper al trabajo?, apúntalo en tu menú semanal.
- El método Harvard consiste en comer saludablemente llenando tu plato con esta proporción: la mitad de vegetales y verduras, un cuarto de hidratos de carbono y el otro cuarto restante de proteínas.
- Apuesta por el agua como bebida principal.
- Ten siempre presente las raciones semanales recomendadas en la pirámide nutricional: 4-6 raciones al día de patatas, arroz, pan y pasta (damos prioridad a las formas integrales); 2 raciones mínimas diarias de verduras y hortalizas; 3 raciones mínimas diarias de fruta; 3-6 raciones al día de aceite de oliva; 2-4 raciones al día de leche y sus derivados; 3-4 raciones a la semana de pescado; 3-4 raciones a la semana de carnes magras, aves y huevos (alternar su consumo); 2-4 raciones a la semana de legumbres; 3-7 raciones a la semana de frutos secos; ocasional y moderado el consumo de embutidos, carnes grasas, dulces, snacks, refrescos, mantequilla, margarina y bollería. (fuente Ministerio de Sanidad)
¿Te animas a comenzar con tu menú semanal? si estás acabando con esas sobras en la nevera y pronto tienes que hacer la compra…. es tu mejor momento. Y si necesitas ayuda, los profesionales de nuestra clínica de nutrición en Madrid te las resolveremos sin problemas.